Las lapas (patella) son un género de moluscos de la clase de los gasterópodos reconocibles por su concha cónica que, vista desde arriba, recuerda la forma de un plato. La mayoría de las lapas son marinas, pero algunas especies habitan en el agua dulce, estas han desarrollado ciertos órganos que les permiten respirar aire y a su vez absorber el oxígeno del agua. Al respecto de la clasificación de las distintas especies existen ciertas controversias porque los biólogos marinos afirman que las lapas auténticas son animales marinos que respiran a través de branquias. Comúnmente las personas suelen llamar lapa a ciertos moluscos que no están relacionados taxonómicamente con los moluscos de la familia Patellidae, pero que comparten algunas características físicas similares.
La fisionomía externa de las lapas puede dividirse en concha y pie. Internamente estos gasterópodos tienen una fisionomía similar a la mayoría de los moluscos. Los biólogos marinos estudian y dividen la morfología interna de las lapas de la siguiente forma:
El sistema nervioso de los moluscos del grupo Patella está formado por dos ganglios que cumplen varias funciones y desde donde se ramifican las terminaciones nerviosas que se conectan con los distintos órganos. Los sentidos de la lapa son primitivos, bastante limitados. Sus ojos apenas pueden detectar luces y sombras y son incapaces de producir imágenes definidas. La locomoción de estos moluscos es posible gracias a un pie muscular. El órgano central del sistema circulatorio de las lapas es un corazón. En el pequeño cuerpo de las lapas se encuentran dos riñones con una particularidad: el riñón izquierdo es pequeño y su capacidad es limitada, mientras que el riñón derecho es tan grande que en ciertos casos puede abarcar buena parte del manto interno de la lapa, este es el responsable de filtrar la sangre. El riñón derecho solo es superado en tamaño y extensión por el sistema digestivo. Este sistema es el encargado de procesar los alimentos que consume la lapa. Los científicos especializados en el estudio de estos moluscos explican que el tubo rectal de las lapas tiene la función de comprimir muy bien los detritos, porque el ano de las lapas se encuentra cerca de la cabeza y si las excreciones no están bien comprimidas las lapas se ensuciarían su zona rostral con cada excreción. El aparato reproductivo o gónada de las lapas se encuentra entre el pie y el aparato estomacal. El sistema de reproducción de las lapas es primitivo y el ciclo de funcionamiento y reproducción es bastante curioso.
Pasado un tiempo las larvas eclosionan y viven una temporada como organismos flotantes, pero luego se establecen en el fondo y alcanzan la forma final propia de los adultos.
Las larvas se alimentan gracias a un proceso de raspado. El órgano encargado de raspar y extraer la comida de la superficie de las rocas se conoce como rádula. La rádula de las lapas es una estructura formada por al menos un centenar de filas de pequeñas piezas dentales, pero solo un diez por ciento de esta estructura interviene en el procesamiento de los alimentos. Estos dientes se componen de varios minerales como el hierro, el sodio, el potasio, el calcio y el cobre. Los biólogos desconocen como la estructura quitinosa de los dientes de las lapas del género patella se mineraliza. Se cree que su dentadura obtiene los metales como el hierro a través de un proceso de descomposición y posterior distribución del mineral. Estos dientes se van desgastando con el uso, pero los dientes gastados son remplazados con piezas más nuevas de forma constante. En tan solo cuarenta y siete horas las lapas son capaces de reponer una hilera completa de dientes.