La jerarquía de las abejas funciona gracias a las clases de abejas dentro de una colmena. Estos insectos himenópteros cuentan con una clasificación determinada por su sexo y función dentro de la colmena. Es importante destacar que las abejas o grupos de abejas forman parte de una comunidad muy bien definida, con funciones y comportamientos muy marcados. Comprender esto, es entender a plenitud la naturaleza misma de las abejas y gran parte de lo que constituye su estructuración social.
Las clases sociales de las abejas empiezan en la colmena, que es el lugar donde habita una comunidad completa de abejas, existen tres clases de abejas: zánganos, abejas obreras y la abeja reina. Pero sabemos ¿a qué se dedica cada clase de abejas? Las distinciones entre estos individuos de una población de abejas están muy bien demarcadas y diferenciadas, desde sus características físicas y evolutivas hasta el comportamiento que asumen dentro de la estructura social de la colmena.
A continuación, mostramos las 3 clases de abejas que hay dentro de una colmena:
Los zánganos o abejas macho son las abejas de sexo masculino, que desde el mismo momento de su concepción son diferentes. Estos individuos cuentan con un solo cromosoma: el de la abeja reina;pues son producto del desarrollo de los huevos sin fecundar de la madre. Esto quiere decir que los zánganos no tienen padre, solo una progenitora: la abeja reina.
A la forma de reproducción mediante la cual se originan los zánganos, se le denomina partenogénesis, que se basa solo en células sexuales femeninas. Este tipo de reproducción es más común de lo que se piensa;se da también en algunos reptiles, anfibios y otros animales.
Su desarrollo es un poco tardío en relación al resto de los individuos de la colmena. No salen de su celda sino hasta el día número 24, tres días después de las abejas obreras. Incluso la propia celda dónde se desarrolla los zánganos, las distinciones son marcadas;pues son considerablemente más grandes que las de las abejas reinas.
Entre las diferencias fisiológicas más marcadas de los zánganos respecto a las hembras de la colmena, es que éstos no poseen aguijón;por lo que son completamente inofensivos, no tienen la capacidad de picar bajo ninguna circunstancia.
La función de la abeja zángano o macho es proveerle a la abeja reina los espermatozoides para la reproducción de abejas obreras. Sin embargo, las abejas macho no tienen la capacidad de producir miel;sino que se alimentan de la miel que producen las abejas obreras, pero sí pueden colaborar en su función.
El rol de estos individuos es sobre todo reproductiva;sin embargo, pueden ayudan a procesar la miel, transportando el néctar de las flores de una abeja obrera a otra para que éstas la trabajen. Además, los zánganos pueden darles calor a las crías, en vez de las abejas nodrizas obreras;de tal manera que éstas puedan dedicarse a otras labores.
Los zánganos permanecen en la colmena durante el tiempo de la etapa reproductiva de la abeja reina. Una vez culminado este periodo y llegado el invierno, cuando la producción del alimento se detiene, los zánganos son expulsados del panal. Esto provoca que estas abejas mueran de frío y hambre. Este comportamiento es fundamental para garantizar la supervivencia de los individuos esenciales dentro de la colmena: la abeja reina y las crías.
Para fecundar a la reina, el zángano debe alcanzarla en pleno vuelo;por lo que se considera que el macho que la alcance es aquel más apto. Una vez que la ha alcanzado, la cópula se realiza en vuelo y al finalizar, el zángano muere;pues sus órganos sexuales se desprenden de su cuerpo.
Las abejas obreras son los individuos del panal que están encargadas de la recolección del néctar y de la producción la miel. Por lo tanto, les proveen de alimento al resto de los que integran la población. Su función dentro de la colmena es fundamental;sin embargo, no tienen la capacidad reproductiva que sí posee la abeja reina y los zánganos. Estas abejas cuentan con órganos sexuales reproductores que no se han desarrollado de manera apropiada y, por lo tanto, no pueden ejercer funciones reproductivas.
Una distinción clave, respecto a los zánganos, es que las abejas obreras cuentan con dos cromosomas, los correspondientes a la abeja reina y el del zángano que ha fecundado a la progenitora. El proceso de desarrollo de una abeja obrera alcanza su culminación a los 21 días después de que el huevo ha sido depositado en la celda correspondiente.
Las abejas obreras cumplen con diversas funciones durante su vida, según su edad. Los tipos de abejas según sus funciones o mejor dicho las funciones básicas de estos integrantes de la colmena son los siguientes:
Cada una de las funciones que las abejas obreras cumplen es fundamental para el adecuado funcionamiento de todo el sistema que implica la colmena. Así mismo, son estas abejas las que resultan fundamentales para el ecosistema, gracias a la polinización.
La abeja reina es el individuo de la población de abejas más importante, ya que cumple la función fundamental de la reproducción y se considera la líder de la población. Esto quiere decir que ésta es la abeja que está encargada de garantizar las siguientes generaciones que mantienen la población.
El tamaño de la abeja reina es superior al del resto de los individuos de la colmena;además, tiene órganos sexuales reproductores desarrollados. Parte de los órganos de esta abeja es la espermateca, donde almacena el esperma de los zánganos para fecundar los huevos;lo que ya resulta bastante curioso, pero es aún más impresionante conocer cuántos huevos pone una abeja reina: más de 2500 huevos en menos de 24 horas.
Otra diferencia importante con el resto de los individuos de la colmena es lo que come la abeja reina desde el mismo momento de su fecundación: jalea real. Los expertos apuntan que es muy probable que esta sea la sustancia responsable del desarrollo de los órganos reproductores de la abeja reina.
Esta abeja también cuenta con un aguijón, pero es completamente diferente al de las abejas obreras;ya que no tiene punta. También es importante destacar que la reina vive mucho más tiempo en comparación con el resto de los individuos del panal. Mientras que las abejas obreras y los zánganos no viven más de un par de meses;la abeja reina vive entre 3 y 4 años.
Así mismo, es importante resaltar que la abeja reina, como buena líder, mantiene unida a la comunidad de la colmena mediante la segregación de feromonas, que le da la identidad distintiva a la población de abejas y también dirige el comportamiento de los integrantes del panal. El aroma que desprende la abeja reina es compartido con todos los que forman parte de la comunidad, lo que les permite entrar y salir de la colmena;así como facilita el regreso de las abejas obreras que han ido en busca de néctar para la elaboración del alimento.