La tarántula Brachypelma hamorii es un arácnido que forma parte de la familia Theraphosidae. Se trata de una especie que tiene cierta similitud con las tarántulas Brachypelma Smith.
Las hembras de la especie Brachypelma hamorii pueden llegar a crecer más de cinco centímetros. Los machos más grandes apenas alcanzan los 4-5 centímetros. Es una especie de tarántula grande y llamativa, por eso son muy buscadas por los criadores de arácnidos. En las patas de estas arañas se distinguen tres aros o secciones con vello rojizo. La mayor parte del cuerpo de las Brachypelma hamorii está cubierta por una capa de vellos pardos, pero en ciertas zonas se puede observar el característico color rojo o naranja de las arañas mexicanas Brachypelma.
Las tarántulas Brachypelma hamorii son una especie bastante longeva. Sulen vivir entre 8-20 años en estado salvaje. Las hembras pueden llegar a vivir en cautividad hasta 25 años, mientras que los machos apenas viven en promedio hasta cinco años. A lo largo de la vida estas tarántulas mexicanas pasan por un proceso de muda. Eso quiere decir que la capa superficial exterior de la piel es renovada. Durante la muda las arañas pueden reponer apéndices dañados. Este proceso es vital para el crecimiento y ocurre porque el exoesqueleto que cubre buena parte de cuerpo de las tarántulas no puede expandirse, por tal razón este tiene que ser reemplazado para permitir el correcto desarrollo de la araña. Las Brachypelma hamorii cuando son jóvenes atraviesan por varios ciclos de muda, en ocasiones varias veces al año. Las tarántulas Brachypelma hamorii mudan en una recamara especial que construyen en sus guaridas. Antes de iniciar una muda las tarántulas dejan de cazar y de moverse, para conservar energías. Este proceso puede tomar varias horas. Durante la muda la araña permanece de espalda y expulsa ciertos fluidos que hacen que el nuevo caparazón emerja debajo del viejo exoesqueleto. Para deshacerse de la vieja piel, la araña se ayuda con sus patas. Una vez que el proceso de renovación del exoesqueleto se ha completado la araña permanece encerrada en la seguridad de su guarida por algunas semanas. Después de una muda estas tarántulas son vulnerables porque el caparazón aún no se ha solidificado y su mandíbula no ha recobrado la solidez necesaria para capturar presas (los colmillos de las tarántulas también forman parte de su exoesqueleto). Las tarántulas Brachypelma hamorii son bastante tranquilas, pero pueden expulsar vellos urticantes desde el abdomen y sus patas traseras si se sienten amenazadas. No son consideradas venenosas y aunque cuentan con unas mandíbulas prominentes y fuertes no suelen morder a las personas. La mordida de esta tarántula puede ser bastante dolorosa y puede provocar infecciones y alergias, pero no es común que muerdan.
Las tarántulas Brachypelma hamorii se encuentran en la costa mexicana del Pacífico, específicamente en los estados de Michoacán, Jalisco y Colima que es una zona de bosques tropicales. Estas tarántulas suelen construir sus guaridas en lugares con densa vegetación, debajo de algún tronco o roca. Las cuevas de las arañas Brachypelma hamorii son bastante profundas para mantenerse alejadas de los depredadores y para hacer ataques sorpresa sobre sus presas (son cazadoras oportunistas).