El tiburón anguila es un escualo de fisionomía distintiva y rasgos primitivos, razón por la cual se le conoce como tiburón anguila prehistórico. En esta entrada conocerás sus características, alimentación, hábitat y otros detalles relacionados con esta especie.
¿Qué es el tiburón anguila? El tiburón anguila, llamado por los científicos chlamydoselachus anguineus, es un pez cartilaginoso perteneciente a la familia de los clamidoseláquidos. Esta criatura es considerada una especie rara, no solo por su aspecto y sus características físicas, sino también por la proporción en la que se encuentra distribuido en los mares alrededor del planeta.
La primera característica de este animal que salta a la vista es la constitución de su cuerpo, que se asemeja en forma y dimensiones al de una anguila común. El parecido que existe entre este escualo y los anguílidos explica el nombre con el que comúnmente se le conoce: tiburón anguila, aunque no existe ninguna relación entre las dos especies.
En inglés, este pez cartilaginoso es conocido como frilled shark, que puede traducirse como tiburón con flecos, este nombre hace referencia directa a sus prominentes aperturas branquiales, en especial al primer par, que son las más grandes y visibles.
Muchas personas se sorprenden después de observar imágenes de este elasmobranquio, que parece más una serpiente que un pez. Incluso algunas personas no creen que se trata de un tiburón. Esta especie posee muchos rasgos particulares que lo diferencian de los escualos más conocidos, rasgos que describimos a continuación.
Un atributo muy distintivo de la gran mayoría de los tiburones es la aleta dorsal, al punto que, en los lugares cercanos al mar se suele indicar la posible presencia de estos peces con carteles donde se muestra una representación de esta aleta. Para sorpresa de muchos, el apéndice natatorio dorsal del tiburón anguila no se parece al de la mayoría de los escualos es apenas perceptible. También cuenta con otras aletas, que tienen una forma y una distribución muy propia de los peces anguiliformes, es decir: no son prominentes ni poderosas, sino más bien delgadas.
Puede que la dentadura del chlamydoselachus anguineus sea una de las dentaduras más extrañas de todo el reino animal. No es la típica dentadura de tiburón formada por una sucesión de hileras dentales. Los dientes del tiburón anguila están dispuestos en filas individuales y cada fila cuenta con al menos cuatro dientes.
Los dientes del tiburón anguila son, como casi todos los elementos de su fisionomía, bastante distintivos: delgados, filosos y en lugar de ser una pieza con una punta única cuentan con varias terminaciones agudas, por eso estos dientes recuerdan un tridente. En total un tiburón anguila adulto puede llegar a tener hasta trescientos dientes.
La piel del tiburón anguila es de color castaño, aunque la pigmentación puede variar según la edad, así es posible encontrar especímenes en distintas tonalidades del marrón. La dermis de este animal de las profundidades tiene una apariencia pegajosa muy parecida a la piel de otros tiburones considerados primitivos, tales como el tiburón duende.
Al tratarse de un pez que habita en aguas profundas donde la luz es escaza tiene una visión aguda que le permite ver en el medio oscuro. Sus grandes ojos permiten el paso de la poca luz del medio, además cuenta con membranas nictitantes, que les permiten nadar entre las aguas turbias y fangosas con los ojos abiertos.
Los ejemplares machos de esta especie pueden llegar a medir un máximo de un metro con setenta centímetros, mientras que se tienen registros de hembras que alcanzan hasta los dos metros de longitud. Las crías al nacer miden de cuarenta y cinco a sesenta centímetros.
El tiburón anguila es un pez carnívoro que se alimenta de:
Estos últimos constituyen parte importante de su alimentación. Los especialistas en biología marina explican que la principal razón por la cual este escualo se alimenta principalmente de moluscos es porque, aunque cuenta con una gran boca que tiene un alto grado de apertura, ese mismo ratio de abertura le impide aplicar presión. De forma tal que la mordida del tiburón anguila es menos potente que la mordida de otros tiburones, aunque eso no quiere decir que sea una mordida inofensiva, pues sus dientes filosos pueden infligir un gran daño a sus presas. Los estudios que se han realizado a algunos ejemplares capturados han demostrado que puede tratarse de un animal con una digestión rápida o con largos intervalos entre las comidas, pues sus estómagos casi siempre están vacíos.
Los especialistas en biología marina comparan los movimientos del tiburón anguila con el de las serpientes terrestres y aseguran que es un pez de nado lento. A pesar de esto se trata de un excelente cazador que solo se desplaza de forma recta cuando utiliza sus aletas para impulsarse a la hora de alcanzar a alguna presa. No se conoce con detalle la forma en la que este pez caza. Algunos científicos especulan que una vez que el tiburón anguila a ubicado a su presa la enviste y captura utilizando su gran boca. Otros creen que se oculta enroscando su cuerpo, tal como hacen las serpientes, para atacar cuando la presa está cerca. Lo que si se sabe con certeza es que este escualo es conocido por capturar presas grandes, incluso algunas que pueden llegar a ser de la mitad de su tamaño.
Este pez tiene un modo de reproducción conocido como vivíparo aplacental. Tiene un periodo de gestación de treinta y seis meses, es decir tres años. Como habitan en las profundidades se encuentran lejos de la influencia de los cambios estacionales propios de la superficie, por ello no cuentan con una temporada de reproducción y nacimiento específica.
Esta criatura habita en las aguas del Atlántico y el Pacífico y tienen una distribución bastante irregular, así se han registrado en lugares como:
Habita entre los mil y mil quinientos metros de profundidad, aunque se tienen registros que en lugares específicos como la Bahía Suruga, en Japón, este pez se encuentra entre los cincuenta y los doscientos metros de profundidad.
Si bien los especialistas en conservación aseguran que el chlamydoselachus anguineus no es una especie en peligro de extinción, algunos científicos aseguran que esta especie puede extinguirse con facilidad debido a su lenta reproducción.
En este apartado compartimos algunos datos curiosos relacionados con este escualo.