Pitón verde

La pitón verde o Morelia viridis es una serpiente muy fácil de reconocer por su particular color verde esmeralda brillante. Se trata de un reptil grande que puede llegar a medir hasta 2,5 metros. Las hembras son las más grandes de la especie, existen registros de hembras de más de dos metros de largo. El tamaño y el peso varían en función de las condiciones del hábitat. Los machos pueden pesar desde un kilo hasta un kilo con cuatrocientos gramos, mientras que las hembras pueden pesar hasta más de dos kilos. En los ejemplares adultos no se observa el dimorfismo sexual y es difícil diferenciar a las hembras de los machos, salvo en el tamaño y el peso. El cuerpo de estas pitones es delgado y cuentan con una zona rostral larga, aguda y prominente en la que se distinguen unas escamas pequeñas con un patrón irregular. La cola de estas serpientes es larga y tiene una gran capacidad prensil, lo que le sirve a la serpiente para colgarse en los árboles y desplazarse. Aunque en sus escamas destaca el color verde, en la zona lateral se observan escamas blancas o amarillas. En la zona ventral las escamas suelen tener un color amarillo intenso. No todos los ejemplares jóvenes cuentan con el característico verde esmeralda, algunos son de color amarillo brillante o incluso de color rojo. En el dorso de las pitones más jóvenes también se observan unas manchas o motas pardas o marrones que, en ocasiones, pueden tener un orden simétrico. En ciertas regiones los adultos no desarrollan la pigmentación verdosa y conservan los colores de su juventud.  

Comportamiento

Se trata de una pitón arbórea (los especialistas en reptiles la catalogan como la pitón de hábitos más arbóreos que existe). Los ejemplares jóvenes son de hábitos diurnos, pero los adultos son más activos por la noche. La postura que asume esta serpiente a la hora del descanso es un rasgo bastante peculiar y distintivo. La gran mayoría de fotos de la pitón verde la muestran en su posición de descanso. Esta postura consiste en enroscar su cuerpo alrededor de una rama horizontal y posar su cabeza justo al centro. Los biólogos especialistas en reptiles comparan a la forma del cuerpo de este reptil en reposo con una silla de montar. Además de la postura de reposo las pitones verdes también tienen una postura especial para la cacería. En la postura de caza la cola se sujeta con fuerza a una rama, mientras que el resto del cuerpo se enrolla lo suficiente para facilitar la envestida. Es depredada por ciertas aves cazadoras, pero no se trata de una presa fácil porque cuenta con un camuflaje bastante efectivo. Los adultos se esconden entre el follaje frondoso, mientras que los más jóvenes se ocultan entre las ramas y troncos desprovistos de hojas. No cuentan con mecanismos químicos de defensa, no se ha encontrado veneno o toxinas en el cuerpo de este animal que pueda servir para neutralizar a las presas, como ocurre con otras especies de serpientes.

Alimentación

La dieta de la pitón verde es del tipo carnívora. Son astutos cazadores de emboscada que esperan a que sus presas se acerquen para envestirlos y capturarlos. Los hábitos alimenticios de estos reptiles varía en función de su estado de desarrollo. Los ejemplares más jóvenes (aquellos que tienen las escamas amarillas o rojas) suelen cazar invertebrados o pequeños mamíferos diurnos. Los ejemplares adultos, por su parte, suelen capturar presas más grandes, casi siempre mamíferos de hábitos nocturnos. La pitón verde puede pasar hasta dos semanas en la misma rama esperando capturar alguna presa. Se tratan de reptiles de metabolismo lento que no necesitan consumir alimentos de forma constante. En cautiverio se han registrado casos de canibalismo entre las crías. En su hábitat natural esta especie es considerada un controlador de la sobrepoblación de roedores y lagartijas.

Reproducción y ciclo de vida

Se desconocen algunos detalles relacionados con la reproducción de la pitón verde en su hábitat natural. Se sabe que se trata de una especie ovípara. Las crías al eclosionar del huevo miden cerca de treinta centímetros de largo. Los machos alcanzan la madurez sexual a los dos años y medio y las hembras casi a los cuatro años. En cautiverio estas serpientes pueden llegar a vivir hasta por veinte años, se calcula que en su hábitat natural podrían vivir de quince a diecinueve años.

Área de distribución y hábitat

Esta especie de pitón puede encontrarse principalmente en la zona del norte de Australia y las islas y archipiélagos vecinos como Papúa Nueva Guinea. El hábitat de esta serpiente son los árboles de la selva tropical lluviosa.

Cría en cautiverio y estado de conservación

Aunque se trata de una serpiente agresiva es muy preciada entre los criadores y aficionados a las serpientes. Los especialistas en la cría de reptiles han aprendido a criar estos animales en cautividad. La popularidad de esta serpiente como mascota ha supuesto una amenaza para la especie. Las autoridades reportan que un alto porcentaje de las pitones verde que se encuentran en cautiverio no provienen de criaderos especializados, sino que fueron capturadas en estado salvaje. Aunque la especie no figura en la lista de especies amenazadas los biólogos y ecologistas aseguran que se trata de una especie vulnerable que tiene un área de distribución bastante irregular y que su hábitat se ha visto afectado por la deforestación y la contaminación.