Lémur volador o colugo, el orden Dermoptera

El lémur volador o colugo, también llamado comúnmente kaguang, lémur volador malayo, lémur volador de las Islas Sonda, colugo de la Sonda o lémur murciélago es un mamífero bastante particular. Forma parte del orden de los mamíferos dermópteros. El orden Dermoptera fue creado por los biólogos y taxónomos para ubicar exclusivamente a las dos especies de colugos: Galeopterus variegatus y Cynocephalus volans. Exactamente se sitúan dentro de la familia Cynocephalidae, es decir de los cinocéfalos por el aspecto de su cráneo parecido al de un carnívoro del orden de los cánidos. Pese a lo que sugieren sus nombres comunes el colugo no es un lémur y tampoco puede volar. Lo que hace el colugo para desplazarse es planear entre los árboles, tal como planean las ardillas voladoras. Es bastante hábil y se han registrado desplazamientos de más 120 metros, razón por la cual se considera al lémur volador el mejor planeador de los mamíferos terrestres. Debido a la existencia de pocas especies y las afinidades morfológicas con otros animales como los roedores, insectívoros, carnívoros y quirópteros, zoólogos y naturalistas encontraron dificultades a la hora de clasificarlos. Originalmente Linneo los clasificó entre los prosimios, como los lémures, pero más tarde se les agrupo en el nuevo orden Dermoptera. Las 2 especies que lo comprenden se les denomina galeopitecos, de ahí que el nombre que se les atribuye de lémures voladores se tan inadecuado.

Características del colugo

Un lémur volador adulto puede llegar a medir de treinta y tres a cuarenta y dos centímetros de largo, desde la cabeza hasta la base de la cola. La cola de los lémures voladores por lo general mide de dieciocho a veintisiete centímetros de largo. Estos son unos mamíferos bastante livianos, los adultos pesan de novecientos a mil trescientos gramos. La cabeza del colugo es pequeña con hocico puntiagudo, grandes ojos, grandes orejas redondeadas, estas características recuerdan en cierta manera a la de ciertos mustélidos, también por su cuerpo con dimensiones similares a las de un gato. Su cabeza puede girar casi 360 grados igual que la de un búho y gracias a su fantástica vista es difícil ser cazado por los depredadores. Cuenta con garras grandes y fuertes que le permiten sostenerse en los árboles y escalar. Sus extremidades son bastante alargadas y su estructura ósea tiene una gran flexibilidad lo que le da al colugo una apariencia felina. Una característica destacable de su fisionomía se encuentra en la parte inferior (desde el cuello a la cola, pasando por las cuatro extremidades) esta membrana cutánea se inicia desde las mejillas y baja a lo largo de su cuerpo transformándose en una especie de pliegue membranoso que los biólogos llaman patagio y que le permite al lémur volador desplazarse planeando. El pelaje del lémur volador es corto, de densidad espesa y tacto suave, tiene un color variable impregnado siempre de tonos grises, amarillentos y leonados, cuya función es de camuflaje.

Comportamiento

El lémur volador es un mamífero de hábitos nocturnos que se mantiene activo durante la noche y duerme durante el día posado en una rama, envuelto en su patagio a modo de manta esperando a que caiga la noche. Es territorial y puede vivir solo o en pequeños grupos. Los grupos de lémures malayos voladores comparten los árboles que utilizan para dormir y desplazarse. Suelen preferir los árboles con el follaje más denso para descansar o los agujeros que se encuentran en algunos troncos. El movimiento que hacen al escalar las ramas y los troncos de los árboles es bastante peculiar y no son muy ágiles escalando porque no poseen pulgares opuestos, donde realmente destacan es utilizando su patagio para planear. Son tan diestros que pueden deslizarse en el aire hasta cien metros experimentando una mínima pérdida en la elevación de solo diez metros. Cuando las hembras planean usualmente llevan a la cría aferrada a su pecho, la cría inmadura se agarra con sus dientes al pelaje de la madre y a sus pezones, de esta forma la cría nunca cae durante los vuelos acrobáticos. Aun cuando la cría ya tiene pelo permanece en la misma posición hasta que puede llegar a ser totalmente madura. El colugo es un animal arbóreo que no está adaptado a la vida en la tierra, cuando caen de los árboles están indefensos, a merced de los depredadores. En las copas de los árboles si se encuentran amenazados pueden escapar escalando, aunque en ocasiones prefieren quedarse inmóviles.

Los dermópteros son los mamíferos voladores mejor dotados para el planeo, esta extraordinaria habilidad es proporcionada en primer lugar por la perfecta estructura del patagio que esta tan amplia que llega hasta la cola, igual que en los murciélagos, y en segundo lugar por los potentes músculos de sus extremidades que logran el impulso y aguante durante el planeo.

Alimentación del lémur volador

Su capacidad para planear le permite acceder a ciertos tipos de alimentos que se encuentran lejos del alcance de otros animales de la selva tropical lluviosa. Lo que también lo mantiene lejos de los depredadores terrestres y arbóreos. Su dieta se compone de hojas, pero también se alimenta de brotes, algunos insectos y flores como las flores del coco. Algunas noches suele comer solo un tipo de alimento, pero otras puede diversificar su dieta. Los biólogos explican que este mamífero también puede lamer la sabia de los árboles para extraer agua, sales minerales y otros nutrientes.

Área de distribución y hábitat

El lémur volador de las islas de la Sonda o malayo (Galeopterus variegatus) tiene un área de distribución relativamente amplia, puede encontrarse en buena parte del Sudeste Asiático.

  • Islas de la Sonda (Malasia)
  • Norte de Laos
  • Vietnam
  • Camboya
  • Tailandia
  • Singapur
  • Brunéi
  • Las islas de Indonesia (Sumatra, Bali, Java, Kalimantan).

Por su parte, el lémur volador de las Filipinas (Cynocephalus volans) tiene un área de distribución más restringida, solo puede encontrarse en ciertas zonas del sur de Filipinas. Este mamífero puede vivir en distintos hábitats arbóreos como bosques, jardines, plantaciones de hule y coco, orquidearios, áreas montañosas y selváticas, pero no todos esos hábitats tienen las condiciones necesarias para que en ellos puedan vivir un gran número de colugos.

Estado de conservación

El colugo no se encuentra en peligro de extinción, pero es una especie protegida por las leyes de los territorios donde habita. Este animal es cazado con frecuencia por los locales para aprovechar su carne y su pelaje. La mayor amenaza del colugo es el deterioro acelerado de su hábitat.